Cristina Fernández presidió un acto donde inauguró en el distrito bonaerense de Berazategui, la segunda etapa de la reconstrucción de la avenida Valentín Vergara, que demandó una inversión del orden de los 45.503.222pesos.
La obra consta de 4,6 kilómetros de calzada doble de 8 metros de ancho cada una, con cantero central, iluminación, semaforización, desagües pluviales, y se extiende entre la calle 23 y el Camino General Belgrano.
Asimismo, se ejecutó la construcción de dos puentes carreteros sobre el Arroyo Conchitas y otros dos sobre el cruce ferroviario, un distribuidor en el empalme Camino General Belgrano, así como la construcción de rampas para discapacitados y distintos puentes peatonales a lo largo del trazado.
También se realizaron obras complementarias, como la pavimentación de las avenidas Este y Oeste, de la Calle 24 (desde 132 a Dardo Rocha), los desagües de las cuencas La Serranita y Ranelagh Sur, beneficiando a los barrios Santa Rita, Almirante Brown y San Blas. Por último, se firmó un convenio entre el municipio y el Ministerio de Planificación Federal, por el cual se brindará asistencia financiera para ejecutar la pavimentación de áreas periurbanas.
En su discurso, la mandataria señaló que "no hay que tener temor a equivocarse" y consideró que "no se equivocan los que nunca hicieron nada en su vida." La jefa de Estado resaltó el valor de los ideales "Aquellos ideales en un mundo mejor, siempre pienso que todo ser humano bien nacido quiere vivir en un país más justo, más equitativo" y agregó que esa es una obligación de "quienes tenemos responsabilidades" gubernamentales, religiosas, mediáticas.
"Darle una oportunidad a los que la vida no se las dio, de esa manera estamos ayudando a todos", afirmó la Presidenta y continuó " si producimos un país más equilibrado y equitativo también ayudamos a los que no lo necesitan."
También, la mandataria se refirió a la importancia de lo micro en la política, a las necesidades del vecino y afirmó que "en el reconocimiento de todos y cada uno de los conciudadanos" advierte la razón de su vocación.
En otro tramo de su discurso, la jefa de Estado aludió a la reunión con los presidentes de Brasil y Venezuela. En ese sentido, destacó la importancia de los intereses, identidades y visiones comunes de América del Sur.
Por último, saludó la vuelta de los jóvenes a la política "que me alegra el corazón", dijo la Presidenta. En ese sentido , afirmó que "la vida no se agota en uno mismo, uno se reconoce en el otro."
Durante la ceremonia, acompañaron a la Presidenta el gobernador bonaerense Daniel Scioli y el ministro del Interior Florencio Randazzo y el intendente local, Juan Jose Mussi; entre otros funcionarios
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