*Con Argentina de garante, Evo Morales y Fernando Lugo firmaron la demarcación final del límite internacional entre sus países, concluyendo el conflicto fronterizo que mantenían desde la Guerra del Chaco, hace 70 años.
-Cristina Fernández celebró "la unidad latinoamericana".-Intolerancia policial con ciudadanos bolivianos en Plaza de Mayo
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo hoy que en la unidad de los pueblos latinoamericanos "está nuestra fortaleza" y calificó el conflicto bélico entre Bolivia y Paraguay hace 74 años como "una guerra que tuvo olor a petróleo".
"La unidad latinoamericana, el Unasur, el no enfrentamiento y la resolución democrática de los conflictos, nos hacen ver la necesidad de profundizar los lazos de unidad", sostuvo la Presidenta. Cristina se reunió hoy en Casa de Gobierno con los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Paraguay, Fernando Lugo, quienes rubricaron el acta de la memoria final que fija los limites demarcatorios entre ambos países tras la llamada guerra del Chaco.
"Esta es la clausura definitiva de aquella etapa de enfrentamientos sin sentido que llevaron agua a los molinos de los otros que no estaban en América del Sur", sostuvo la Presidenta.
"Esta fue una guerra con olor a petróleo, como tantas guerras", dijo Cristina.
Recordó que en ese conflicto intervino quien luego fuera embajador de los Estados Unidos en la Argentina, Spruille Braden representante de la Standard Oil y que "fue el ariete más importante de lo que constituyó la campaña en contra del entonces coronel Perón".
"Como verán, todo hace juego en América del Sur, nada es producto de la casualidad", remarcó.
En el marco del acto, Evo Morales señaló que se estaba viviendo un "momento histórico" y agregó que "el intervencionismo y el militarismo no son soluciones".
A su vez, Fernando Lugo destacó la unidad de los pueblos y la importancia de la cooperación y la paz.
En tanto, Cristina dijo que "vivimos una etapa inédita, la constitución del Unasur, pero además la mayoría de los mandatarios que hoy representamos a nuestros pueblos nos inscribimos en el campo de los movimientos sociales, nacionales y populares que dejaron la doctrina de los 90 y el Consenso de Washington".
Tras felicitar al presidente de Ecuador, quien fue reelecto ayer en su cargo, la Presidenta enfatizó que "lo importante es lograr la unidad en la diversidad".
"Sin lugar a dudas habrá quienes quieran volver al viejo orden, a la ausencia del Estado" pero "la historia, el peso de la realidad, ha vuelto a poner cosas en su lugar y nos demuestra que es impensable construir América latina sin la presencia de los Estados".
"El rol regulador, la presencia del Estado es garantía para que haya más justicia y una sociedad igualitaria", añadió.
España. ver más >>
Mientras se esperaba la reunión de la presidenta Cristina Fernández con los mandatarios de Bolivia y Paraguay para la firma del histórico tratado de paz, frente a la Casa Rosada reinaba la intolerancia.
Cuando unos 4 mil bolivianos se acercaron a la Plaza de Mayo a saludar a Morales en forma totalmente pacífica, alrededor de 200 efectivos de infantería con dos carros hidrantes intentaron impedir que se realizara la concentración.
Con forcejeos y empujones, la policía formó un cordón amenazador ante una multitud que había llegado para celebrar la reunión tripartita con banderas y carteles, advirtiendo que se despejara la parte de la plaza que enfrenta la Casa Rosada porque de lo contrario utilizarían la fuerza.
Se desconoce aún quién dio la orden de este operativo represivo, cuando puertas adentro se discutía un capítulo de la unidad latinoamericana.
"Esta es la clausura definitiva de aquella etapa de enfrentamientos sin sentido que llevaron agua a los molinos de los otros que no estaban en América del Sur", sostuvo la Presidenta.
"Esta fue una guerra con olor a petróleo, como tantas guerras", dijo Cristina.
Recordó que en ese conflicto intervino quien luego fuera embajador de los Estados Unidos en la Argentina, Spruille Braden representante de la Standard Oil y que "fue el ariete más importante de lo que constituyó la campaña en contra del entonces coronel Perón".
"Como verán, todo hace juego en América del Sur, nada es producto de la casualidad", remarcó.
En el marco del acto, Evo Morales señaló que se estaba viviendo un "momento histórico" y agregó que "el intervencionismo y el militarismo no son soluciones".
A su vez, Fernando Lugo destacó la unidad de los pueblos y la importancia de la cooperación y la paz.
En tanto, Cristina dijo que "vivimos una etapa inédita, la constitución del Unasur, pero además la mayoría de los mandatarios que hoy representamos a nuestros pueblos nos inscribimos en el campo de los movimientos sociales, nacionales y populares que dejaron la doctrina de los 90 y el Consenso de Washington".
Tras felicitar al presidente de Ecuador, quien fue reelecto ayer en su cargo, la Presidenta enfatizó que "lo importante es lograr la unidad en la diversidad".
"Sin lugar a dudas habrá quienes quieran volver al viejo orden, a la ausencia del Estado" pero "la historia, el peso de la realidad, ha vuelto a poner cosas en su lugar y nos demuestra que es impensable construir América latina sin la presencia de los Estados".
"El rol regulador, la presencia del Estado es garantía para que haya más justicia y una sociedad igualitaria", añadió.
España. ver más >>
Política - 27.04.2009
Con empujones y amenazas, la infantería intentó dispersar a la colectividad boliviana que se congregó frente a la Casa de Gobierno para recibir al presidente Evo Morales, antes de su reunión con Cristina Fernández y Fernando Lugo. Mientras se esperaba la reunión de la presidenta Cristina Fernández con los mandatarios de Bolivia y Paraguay para la firma del histórico tratado de paz, frente a la Casa Rosada reinaba la intolerancia.
Cuando unos 4 mil bolivianos se acercaron a la Plaza de Mayo a saludar a Morales en forma totalmente pacífica, alrededor de 200 efectivos de infantería con dos carros hidrantes intentaron impedir que se realizara la concentración.
Con forcejeos y empujones, la policía formó un cordón amenazador ante una multitud que había llegado para celebrar la reunión tripartita con banderas y carteles, advirtiendo que se despejara la parte de la plaza que enfrenta la Casa Rosada porque de lo contrario utilizarían la fuerza.
Se desconoce aún quién dio la orden de este operativo represivo, cuando puertas adentro se discutía un capítulo de la unidad latinoamericana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Mostrar botones para compartir