Congreso Nacional y Latinoamericano de cartoneros y recicladores.

Claudia Bernazza expuso en el II Congreso Nacional y Latinoamericano de cartoneros y recicladores

El 1º de mayo dio comienzo en el Complejo Turístico de Chapadmalal el II Congreso Nacional y Latinoamericano de cartoneros y recicladores.

Entre los disertantes cabe destacar la presencia de Luis Coyupetru, Subsecretario de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación; Rodolfo Pastore, Profesor de la Universidad Nacional de Quilmas; Carlos Barragán, Asesor Municipal de Las Flores; Edmundo Ferretti, Profesor de la Universidad de La Plata, Claudia Bernazza, Diputada Nacional, Ricardo Jesús Díaz, perteneciente a la Dirección General de Gestión Integral de Residuos e Higiene Urbana de la Municipalidad de La Plata y Walter Blanco, del Movimiento Nacional de Trabajadores Cartoneros y Recicladores (MOCAR).
Entre los temas que fueron desarrollados durante el encuentro pueden citarse: “Medio Ambiente, Recursos Naturales, Desarrollo Sustentable y Reciclado”, “Economia Social y Solidaria”, “Capacitación, formación técnica y administración de plantas”, “Comunicación y Redes”.

A continuación presentamos las palabras de Claudia Bernazza:
Como compañera del movimiento nacional y popular es un gusto estar con los trabajadores del Reciclado, por el orgullo que me da y por el respeto que les tengo por el fantástico movimiento que ustedes han hecho a través el MOCAR.
Como Diputada me he auto impuesto dos o tres preocupaciones. Nosotros ya hemos recuperado la idea que Argentina es nuestra, no es de algunos dueños, es del pueblo Argentino. Por lo tanto la economía de la Argentina es un problema de los argentinos, es de todos y sobre todo de los que estuvimos afuera, porque el modelo que estaba impuesto nos dejó afuera de toda oportunidad y afuera de las riquezas que nuestro país producía.
Este movimiento nace por la cantidad de trabajadores que se debieron hacer por fuera de las reglas de juego. Y en este momento nosotros estamos recuperando ser dueños de la Argentina.
Yo estoy apostando a ser una representante de los bonaerenses en el Congreso para que se hagan las leyes que necesitamos para que el pueblo definitivamente recupere las riendas de este país. Y ustedes bien saben que se nos está haciendo bastante difícil.
El año pasado hubo algunos que, acostumbrados a que los gobiernos, los presidentes, hagan lo que ellos decían, se encontraron con que de golpe no se hacía lo que ellos decían y entonces han visto una mesa de enlace y los medios de comunicación que mostraron todos nuestros defectos y ninguna de las cosas que mas o menos nos salieron bien. Una aclaración, todo este proceso que lleva adelante el Gobierno Nacional tiene muchísimos errores por compañeros que no tienen experiencia en el Estado o porque no están preparados. Pero no es por lo errores que quieren que perdamos en las próximas elecciones sino mas bien porque estamos teniendo algunos aciertos, sobre todo en recuperar al Estado como el instrumento de un pueblo que toma decisiones sobre la Economía. Así que por ahora, sabiendo que este es el concepto, un Estado, un Gobierno que se ocupa de ordenar la economía sabiendo esto, vamos caminando hacia las cosas que nos faltan.
Les cuento los tres o cuatro desafíos que nos ponemos como objetivo y para los cuales quedo a su disposición. Ya hemos puesto la política por delante de la Economía, hemos logrado lo que se llama Gobierno, es decir hay un Presidente, un Gabinete y un Congreso Nacional que discute los grandes temas y que toma las decisiones políticas a un punto tal que todos están asombrados de lo poco conocido que es un Ministro de Economía, cuando en realidad efectivamente tiene que ser poco conocido, porque lo importante es que este MInisterio haga lo que le dice el Gobernante, el actor político, el conductor político que es el Presidente, la Presidenta en este caso.
Y el Congreso tiene que discutir los temas de fondo tanto del desarrollo como del orden del país. En esa discusión política donde hemos recuperado el Gobierno, todavía no hemos recuperado la administración. Y hay muchas veces que el Estado parece nuestro enemigo. Cada vez que una organización popular, una organización social se quiere convertir en una Asociación Civil, en una Fundación, en una Cooperativa, la cantidad de papelerío, las veces que nos hacen ir, las veces que hemos hecho viajes y viajes para que nos digan que nos falta un papel, que nos falta una fotocopia, todos nosotros lo sabemos.
A veces pareciera que el Estado, el aparato del Estado se pone en contra de la organización social y del otro lado del mostrador hay trabajadores públicos que nunca participaron de un proyecto. Hace tanto tiempo que el trabajador publico está resignado, que no le cree a sus funcionarios políticos que a veces pierde la idea que es un trabajador de este pueblo y no participa de un proyecto colectivo dentro del Estado.
Nosotros vamos a ese mostrador y nos encontramos con un trabajador cansado, sin ganas, que no reconoce la importancia de lo que esta haciendo. Por ese lado va a ser muy importante, y a eso es a lo que me he estado dedicando a la formación de los trabajadores públicos. Para esto es muy importante recuperar una gran alianza con los sindicatos de los empleados públicos, básicamente con UPCN y ATE para que sean lugares de formación de los trabajadores y que ellos realmente respondan a que proyecto de gobierno y sepan cómo hacer las cosas más fáciles.
Pero, por otro lado vamos a tener que cambiar algunas leyes y reglamentaciones. Les cuento en qué ando yo: vamos a dos tipos de organizaciones. En el caso de las organizaciones del artículo 33 del Código Civil Asociaciones Civiles y Fundaciones son organizaciones muy poco reconocidas por el Estado porque está mucho mas preparado para dialogar con Sociedades Comerciales que con Asociaciones Civiles y Fundaciones, a punto tal que son las cenicienta de las Direcciones de Personas Jurídicas porque las Sociedades Comerciales tienen muchos mas abogados, contadores, gestores que le hacen los trámites y muchas veces los directores de Personas Jurídicas son personas que vienen de ese palo y no de las organizaciones sociales.
Los que andamos en Asociaciones y Fundaciones no sabemos cómo se arma un estatuto, nos cuesta armar un acta constitutiva. Vamos y nos dicen que no, que la firma debemos hacerla ante escribano, cuando vamos a hacer el balance a fin de año descubrimos lo caro que es y tenemos que lidiar a ver con qué contador amigo conseguimos. Nos cuesta mucho tener los papeles al día y nos llegan esas cartas durísimas de Personas Jurídicas donde nos dicen que estamos en falta y al final eso también genera un gran desgaste en la organización. Los compañeros se empiezan a pelear porque vos te olvidaste de ir a La Plata, vos te olvidaste de llenar los papeles, es decir, nos ponen de muy mal humor como organización. Somos la hermanita perdida, somos la cenicienta de Personas Jurídicas. Estoy embarcada con algunos compañeros en el Congreso sobre la necesidad de una agenda legislativa y una agenda ejecutiva de las organizaciones sociales por lo cual deberán luchar ustedes también.
Además de la ayuda para presentar los papeles para convertirnos en Personas Jurídicas, la legislación debería tener tres o cuatro arreglos. Primero, tener un régimen laborar simplificado: cuando tomamos un empleado, pasamos a pertenecer al gremio de UTEDyC, debiéramos tener menos cantidad de aportes y un subsidio del Estado para estos aportes. Esto lo estamos conversando con UTEDyC, con el Ministerio de Trabajo porque sino va a ser muy difícil que muchos compañeros que están de forma informal puedan pasar a ser trabajadores formales porque las organizaciones sociales no tienen tanta capacidad para tenerlos en regla. Primero el régimen laboral simplificado del tipo de las empleadas domesticas.
Necesitamos también tener lo que se llama un Bien de Utilidad Social previsto por la Ley, que es como el Bien de Familia. Es decir que una propiedad de la Organización Social sea inembargable. De manera tal de que si hay un accidente de trabajo o un juicio laboral o de otro tipo que va contra los bienes de la organización, que al menos pierda parte de su patrimonio para pagar el mismo pero al menos la principal propiedad, no la pierda. Entre paréntesis, estamos intentando aprobar esta Ley de Bien de Utilidad Social.
Tercero: necesitamos tener una tarifa de utilidad social para que las tarifas de servicios públicos no nos asimilen a los comercios. Porque lo nuestro no es la renta, nosotros no estamos por la ganancia, lo nuestro es otra forma del tratamiento de la economía, es una economía solidaria como recién explicaba el compañero. Muchas veces pasa que cuando llegan a nuestra organización nos dicen que no somos una familia, entonces nos aplican la regla del código comercial con los costos, tarifas e impuestos que esto conlleva.
Dentro de las organizaciones estamos necesitando un marco de tipo legal que obligue a todas las prestaciones de servicios públicos, a municipalidades y al Estado en general, a priorizar a las Organizaciones Sociales antes que a otros tipos de entidades en la prestación de algunos tipos de servicios. Antes que a las constructoras y a ese tipo de organizaciones en general.
Estos son algunos de los Proyectos de Ley que estamos llevando adelante.
En el caso de las cooperativas ustedes saben, tienen más leyes de fondo. Están más avanzados en eso. Tienen más leyes que las Asociaciones Civiles y Fundaciones. Igualmente, por varios problemas dispositivos y más precisamente por el sistema impositivo regresivo que tenemos en la Argentina, las cooperativas tienen muchísimos problemas para hacerse sustentables. A punto tal que a veces conviene que sean sociedades de hecho o que sus integrantes sean monotributistas. Darle a las cooperativas las facilidades para que sean la forma económica mas ventajosa hace que todavía falten cambios no tanto de leyes sino de reglamentación.
Para Asociaciones, Fundaciones y Cooperativas tiene que cambiar el régimen impositivo argentino. Los impuestos no están matando nada más que a D´Angeli y al campo. El sistema impositivo argentino grava a la producción de tal manera que el Estado pasa a ser un socio ´bobo´ de la producción. Las PYMES, los Monotributistas y las cooperativas están en problemas porque los impuestos se vuelven muy duros para una economía que entra en el circuito formal.
Cuando la gente del campo va contra la ONCCA, va contra los impuestos y no están teniendo una postura solidaria. En general la Argentina debe revisar los impuestos para todos los argentinos, no sólo para los sojeros. También necesitamos que cambie la forma de pagar impuestos y esta es una agenda pendiente.
Otra ley que necesitamos cambiar y estoy embarcada en presentar ese proyecto, es la conocida Ley de Privatizaciones o Ley Dromi. Hay una Ley en Argentina que promueve que se privaticen los Servicios Públicos y que prevé que sólo puedan tomar esos servicios las Sociedades Comerciales. Estamos generando una ley que primero prevea que haya un debate en el Congreso acerca de si ese servicio es necesario que se privatice o no y si en caso que se deba privatizar, si hay personas en la sociedad que se puedan hacer cargo de ese servicio y no sea el Estado. Para que primero que nada se de ese servicio para que lo preste una cooperativa o una organización de la economía social. Eso está previsto en un artículo de nuestra ley. Con lo cual ya no van a hacer más las grandes empresas concentradas, los capitales internaciones los que se hagan cargo de prestarles servicios al pueblo argentino.