El cierre definitivo de oficialización de listas en la Provincia de Buenos Aires dio algunas sorpresas fundamentalmente en las listas opositoras de Unión Pro y el Acuerdo Cívico y Social, que sirvieron para ordenar o descomponer situaciones ya de por si complicadas.
En el partido que conduce Francisco De Narváez en la Provincia de Buenos Aires sorprendió la súbita “resurrección” de las listas de Fernando Galmarini, en San Isidro, y las otras que habían quedado en el camino en Avellaneda y San Fernando.
En tanto en el Acuerdo Cívico y Social se tomó la drástica decisión de archivar las listas distritales que representarían al CONFE de Julio Cobos, el Partido Socialista, actualmente intervenido en la Provincia y el MOBEPRO, personería jurídica donde se apoyaban los seguidores de Unión Por Todos, de Patricia Bullrich, en la Provincia.
Tampoco tuvo suerte Gustavo Posse, quien no pudo sostener a sus aliados que en varios municipios pretendían aparecer con listas “colectoras” del Acuerdo Cívico y Social.
Entonces, en Unión Pro la mayoría de las localidades han conseguido unificar criterios y sólo un puñado de distritos quedaron con dos referencias locales, tal el caso de San Miguel, Tres de Febrero, San Fernando, San Isidro, Avellaneda Quilmas y Lomas de Zamora, entre otros municipios.
Por su parte el Acuerdo Cívico y Social sólo aceptó que los referentes del ARI, el Gen de Margarita Stolbizer y la Unión Cívica Radical tengan referentes propios en caso de no llegar a un acuerdo.
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