A falta de una, dos

En una noche festiva, la Tigresa Acuña superó por fallo unánime a Locomotora Oliveras en el Luna Park y se quedó con la unificación de los títulos.

por Germán Campisi

Ahora, Marcela es la campeona mundial tanto de los supergallo de la AMB (Asociación Mundial de Boxeo) como de la CMB (Consejo Mundial de Boxeo). Acuña, con sus 54.850 kg, se impuso por puntos en un fallo unánime e inobjetable ante la rubia Oliveras (54.350 kg), ante más de diez mil personas en la cuna del boxeo argentino.

La Tigresa de 32 años era dueña del cetro de la AMB y, tras la victoria, luce también el cinturón de la CMB, que pertenecía a su rival de turno. Hasta que los tres jueces fallaron a favor de la mujer que vive en el Conurbano con los siguientes números: 97-93, 95-94 y 98-91.

Después de varios meses con declaraciones cruzadas en los medios, llegó el día D. El mítico Luna Park se vistió de gala para el evento y las chicas no desentonaron. Una rubia de un lado, una morocha del otro y piñas por doquier.

En las primeras vueltas fue Locomotora Oliveras quien lideró las acciones, su potencia era superior a la técnica de la Tigresa que todavía no conseguía afianzarse en el cuadrilátero. De todas formas, en el cuarto round la velada se emparejó y, ya en el quinto asalto, Acuña dejó a la jujeña cara a cara con la lona. Un reflejo de lo que iba a deparar la noche.

"La técnica y la inteligencia le ganaron a la fuerza", dijo Acuña apenas finalizado el match; mientras que la formoseña sentenció: "Gracias al Luna Park, que siempre está conmigo. Fue una pelea inolvidable y haremos la revancha. El público fue el beneficiado, porque vio a dos mujeres que dejaron la vida", que ahora tiene un récord de 31 victorias y cinco derrotas.

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