Bignone empezó a ser juzgado por crímenes de lesa humanidad cometidos en Campo de Mayo
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El último dictador es juzgado a partir de hoy junto a otros cinco generales y un comisario bonaerense, acusados de 58 secuestros, desapariciones y tormentos cometidos hace tres décadas en Campo de Mayo, el mayor centro clandestino de detención del país. Julio Alak presenció el proceso y afirmó que "se trata de uno de los juicios más esperados".
Centenares de familiares levantaron las fotos de las víctimas apenas los imputados ingresaron en fila a la sala de audiencias, donde se destacaba la presencia del ministro de Justicia, Julio Alak, y miembros de organismos de derechos humanos, entre ellos Taty Almeida, Angela Boitano e HIJOS.
"Se trata de uno de los juicios mas esperados por la comunidad y por los organismos de derechos humanos, por la magnitud de lo crímenes allí cometidos", dijo Alak, quien se declaró interesado "personalmente" por haber patrocinado, tras la restauración democrática, denuncias de enterramientos clandestinos en le cementerio de Boulogne.
En los alrededores de tinglado de la localidad de Florida, conseguido a último momento por el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín para sesionar, un centenar de manifestantes de la Corriente 26 de Julio, y el PC agitaban banderas.
A último momento fue excluido del juzgamiento el ex jefe de la escuela de ingenieros, Eduardo Alfredo Espósito, a quien el tribunal declaró "sin las facultades mentales plenas", aunque recomendó rehacer las pericias en seis meses.
En cambio, solo autorizó a abandonar la audiencia por la jornada inicial al ex jefe de inteligencia, Fernando Verplaetsen, afectado por un "cuadro de diarreas" con certificado médico.
Los restantes acusados son los ya condenados generales Jorge Omar Riveros, que fue jefe del Comando de Instituto Militares de Campo de Mayo, y Jorge Osvaldo García, que comandó la escuela de infantería; el ex jefe de la inteligencia militar Carlos Tepedino, y Eugenio Guañabens Perelló, ex director de la Escuela de Servicios para Apoyo de Combate "General Lemos".
Este es el segundo juicio donde se ventilan delitos de lesa humanidad cometidos en Campo de Mayo, donde funcionaron al menos cuatro centros clandestinos de detención de los cuales, a diferencia de la ESMA, hubo muy pocos sobrevivientes, la mayoría de los cuales comenzará a testimoniar en los próximos días.
Los primeros casos leídos hoy referían a detenidos que lograron identificar su lugar de cautiverio a los conocidos como "El Campito" y La Casita", de donde fueron "blanqueados" en la comisaría de Bella Vista, a cargo del también imputado comisario Germán Montenegro.
El TOF 1de San Martín, que integran jueces Marta Isabel Milloc, Héctor Sagretti, Daniel Alberto Cisneros y Lidia Soto (sustituto), sesionará los martes, miércoles y jueves, con un máximo de cinco horas, para preservar la salud de los acusados, en su mayoría octogenarios que tras eludir la justicia durante tres décadas, llegan al juicio bajo el régimen atenuado de prisión preventiva domiciliaria.
En los alrededores de tinglado de la localidad de Florida, conseguido a último momento por el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín para sesionar, un centenar de manifestantes de la Corriente 26 de Julio, y el PC agitaban banderas.
A último momento fue excluido del juzgamiento el ex jefe de la escuela de ingenieros, Eduardo Alfredo Espósito, a quien el tribunal declaró "sin las facultades mentales plenas", aunque recomendó rehacer las pericias en seis meses.
En cambio, solo autorizó a abandonar la audiencia por la jornada inicial al ex jefe de inteligencia, Fernando Verplaetsen, afectado por un "cuadro de diarreas" con certificado médico.
Los restantes acusados son los ya condenados generales Jorge Omar Riveros, que fue jefe del Comando de Instituto Militares de Campo de Mayo, y Jorge Osvaldo García, que comandó la escuela de infantería; el ex jefe de la inteligencia militar Carlos Tepedino, y Eugenio Guañabens Perelló, ex director de la Escuela de Servicios para Apoyo de Combate "General Lemos".
Este es el segundo juicio donde se ventilan delitos de lesa humanidad cometidos en Campo de Mayo, donde funcionaron al menos cuatro centros clandestinos de detención de los cuales, a diferencia de la ESMA, hubo muy pocos sobrevivientes, la mayoría de los cuales comenzará a testimoniar en los próximos días.
Los primeros casos leídos hoy referían a detenidos que lograron identificar su lugar de cautiverio a los conocidos como "El Campito" y La Casita", de donde fueron "blanqueados" en la comisaría de Bella Vista, a cargo del también imputado comisario Germán Montenegro.
El TOF 1de San Martín, que integran jueces Marta Isabel Milloc, Héctor Sagretti, Daniel Alberto Cisneros y Lidia Soto (sustituto), sesionará los martes, miércoles y jueves, con un máximo de cinco horas, para preservar la salud de los acusados, en su mayoría octogenarios que tras eludir la justicia durante tres décadas, llegan al juicio bajo el régimen atenuado de prisión preventiva domiciliaria.
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